Esta semana en el Parque de Bomberos de Gijón presentamos el libro “EL CUERPO DE BOMBEROS DE GIJÓN, 125 años luchando contra el fuego”, un volumen que conmemora el siglo y cuarto de vida del servicio de bomberos de la Villa de Jovellanos.

Se trata de una gran obra del autor Javier Granda. Una obra amena, didáctica, visual que a través de 131 páginas resume una larguísima vida que comenzó en un lejano 1890 y que ha llegado hasta nuestros días bajo el paraguas de los valores que resumen la labor ejemplar de todos los miembros pasados y presentes de este cuerpo; valor, dedicación y audacia.

Felicito a todos los componentes del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios de Gijón por su labor diaria que realizan en pro de la ciudadanía, muchas veces arriesgando su piel, sin mirar atrás y sin preguntar cuando, dónde o porqué.

El libro constituye el número 31 de la colección Memoria de Gijón. Una serie que nació en el año 2001 con la obra “El Arenal de San Lorenzo”, de Luis Miguel Piñera y que fue completada este mismo año 2015 con el folleto “La bici en Gijón; del velocípedo al carril bici”, de Ángel Mato. Desde el equipo de gobierno queremos seguir enriqueciendo la mencionada compilación, intentando que anualmente se pueda añadir como mínimo un ejemplar a la serie sobre la memoria gijonesa. No siempre es fácil, razones presupuestarias complican esta labor, pero aunque difícil no es imposible, y la prueba la tenemos hoy con el volumen 31 dedicado al servicio de bomberos.

 

Durante el acto de presentación recordamos a dos bomberos fallecidos en acto de servicio el 13 de diciembre de 2005, -los únicos componentes del cuerpo que perdieron su vida en acto de servicio desde la formación del cuerpo-; José Ramón Bulnes y José Antonio Regueiro; conocidos cariñosamente como cabo Maraques y Regue.